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los bandidos de la hoya

155º E.B. "los profesionales de la discapacidad" [1.02.13]

155º E.B. "los profesionales de la discapacidad" [1.02.13]

   En esta ocasión, hablamos de algo con lo que estamos muy familiarizados ya que estos profesionales están con nosotros día a día en los diferentes ámbitos de nuestra vida como pueden ser en el trabajo en nuestro tiempo libre y de ocio, etc…

   Los bandidos encargados de abrir el programa fueron: Alberto, Mamen, David, Antonio G., Blanquita, Mónica y Javier.

   En primer lugar escuchamos un texto que nos introduce sobre el tema que han escrito nuestras compañeras  Cristina y Alba, de Down.

 

Las entidades que trabajan en la atención a personas con algún tipo de discapacidad, están formadas por equipos complejos de profesionales dedicados a mejorar la vida de estas personas. Para ello cada profesional se dedica a especialidades o departamentos deferentes, por ejemplo en salud están los médicos, fisoterapéutas, enfermeros/as, técnicos sociosanitarios, etc.  Los especialista de los temas sociales son los educadores sociales, trabajadores sociales, psicólogos, logopedas, psicopedagogos, etc. Otros se dedica a temas laborales para ayudar a encontrar un trabajo y otros se dedican a temas de ocio y campamentos. Todas estas disciplinas están coordinadas bajo la dirección y gestión de los gerentes, directores y presidentes de las entidades.

Y no nos podemos olvidar de los voluntarios y voluntarias que son puntos de apoyo importantes para llevar a cabo el trabajo de estos profesionales de una manera más cómoda y directa, ellos ayudan mucho, dan su esfuerzo y su compañía y hacen que todo sea un poco más fácil.

Los usuarios de las entidades tenemos muy buena relación con todos ellos porque nos queremos mucho, con algunos llevamos muchos años, hemos vivido muchas experiencias juntos, viajes, cursillos, días de estudio, trabajo y aprendizaje, los profesionales de las entidades al final se convierten casi en familia nuestra.

 

   Después vivimos otra divertida aventura de nuestros reporteros Macario y Chulapita, a cuyos personajes pusieron voz: Magdalena, José Luís, Javier y Fernando.

 

BANDIDO: Vamos a conectar con nuestros reporteros Macario y Chulapita ¿Dónde os encontráis?

 

MACARIO: Estamos jugando un torneo de baloncesto entre las diversas asociaciones que estamos en la radio.

 

CHULAPITA: Y como en la liga que estamos tienen tres árbitros profesionales.

Nosotros no tenemos nada que envidiar porque tenemos comos árbitros a los profesionales de la discapacidad.

 

ÁRBITRO: Falta personal.

 

CHULAPITA: Ahora traemos más de cada asociación.

 

MACARIO: No, hombre que la pista ya está ocupada.

 

ARBITRO: No, hombre que si cometes cinco faltas quedas eliminado y ya no puedes jugar más.

 

CHULAPITA: ¿Y quién es usted para prohibirme jugar?

 

MACARIO: Si te pones así al banquillo.

 

ARBITRO: Técnica a Chulapita.

 

CHULAPITA: Que yo no soy técnica de ninguna asociación ni quiero ser árbitro.

 

MACARIO: Que noooo! Chulapita.Que una falta técnica es que te van a expulsar del juego.

 

CHULAPITA: Ah! Lo entiendo. Pásame el balón que voy a meter canasta.

 

ARBITRO: PIII! Dobles.

 

MACARIO: Señor árbitro. Yo le juro que Chulapita no ha bebido hoy jerez con lo que es imposible que

vea doble

 

ARBITRO: Dobles es botar el balón con las dos manos

 

CHULAPITA: Oiga señor árbitro esto no es un torneo de mancos sino de personas con discapacidad.

 

ARBITRO: Pi!!!!!!! Dos tiros libres.

 

MACARIO: ¿Ande está la diana?.

 

CHULAPITA: ¿Y los dardos?

 

ARBITRO: ¿Uy que paciencia? Haga usted el favor de meter el balón en la cesta

 

MACARIO: ¿Qué pasa , que ya recogemos?

 

CHULAPITA: No quieren que lances el balón a ver si lo encestas allá arriba.

 

MACARIO: Toma que puntería, se ha quedado encajado entre los hierros.

 

CHULAPITA: Pues que salte el pívot y lo coja

 

MACARIO: No creo que llegue porque va en silla de ruedas.

 

CHULAPITA: Que vengan los del vivero de Atades con esas escaleras que usan para podar árboles, a

ver si así, el arbitrucho ese sigue diciendo que es falta personal.

 

ARBITRO: Esto no hay quien lo aguante.Pi ¡ Se suspende el partido por incompetencia de los participantes

 

MACARIO: Será insensato con toda la atención que le hemos prestado durante el partido.

 

CHULAPITA: Bueno, pasa de él que ya nos ha dado mucha guerra. Vamos a ir devolviendo la conexión.

 

BANDIDO: Bueno dejamos a nuestros reporteros discutiendo en un mano a mano con el  árbitro. Hasta el próximo programa.

 

   En aquel programa nos acompañaron Merche Izquierdo, Jorge Arbués, Miguel Alfranca y Maider Nacenta, todos ellos profesionales de la discapacidad y bandidos.

   A todos ellos volvemos a agradecerles que se pusieran delante del micrófono junto a los bandidos tertulianos habituales.

   Las bandidas Concha, Loreto, Cristina M. y Fina nos contaron más cosetas sobre ellos.

 

Merche Izquierdo Mallada trabaja en ASPACE HUESCA desde hace 30 años. Tiene sus raíces en el pueblo de San Jorge y allí vivió hasta los 20 años. Ha visto crecer y desarrollarse ASPACE HUESCA desde sus orígenes, cuando sólo eran 7 trabajadoras y 13 usuarios atendidos hasta hoy, con una plantilla de 62 personas trabajando y más de 140 atendidas. Ha conocido tres sedes y ha visto evolucionar también los medios y métodos de trabajo. Merche es una persona pasional y sincera, con alma de artista. Le encanta pasear, pintar y todas las manualidades creativas. También disfruta con la música y el baile. Es muy vitalista, y eso lo agradecemos todos los que compartimos horas a su lado.

 

Jorge Arbués Salazar tiene 35 años y es de Huesca, es diplomado en Magisterio Infantil y licenciado en Pedagogía, además de monitor de natación y socorrismo.

   Trabajador de la Asociación Down Huesca desde hace 4 años. Asume el cargo de responsable de Nuevas Tecnologías y Ocio, deporte y tiempo libre, además de formar parte del área de educación de la Asociación. Le gusta el deporte y la comida. Más vale comprarle un traje que invitarle a comer.

 

 

         Miguel Alfranca  tiene 29 años es natural de Huesca y trabaja en ATADES desde hace 4 años, comenzó como monitor de talleres, después paso a  monitor de fin de semana, y ahora en la actualidad ocupa un puesto de monitor en la residencia de la 3ª edad de Atades Huesca.  Está terminando de estudiar un modulo de auxiliar de enfermería, para tener una mayor formación para poder atender a los usuarios de Atades. Es un chico deportista y su gran afición en el balonmano tanto verlo como practicarlo. Su trabajo le gusta y le motiva, eso lo transmite tanto a los usuarios como a la gente que  hemos trabajado con él.

 

        Maider Nacenta, de Huesca , trabaja en ASAPME desde hace mas de 7 años,  es coordinadora de la sede de Huesca,  trabajadora social y  tambien es monitora de varias actividades de ocio y,  como casi todos los compañeros de ASAPME, hace un poco de todo. En los bandidos es la que hace las fotos y la que empieza los aplausos. Le encanta su trabajo,  y casi lo que más, la radio, ya  que disfruta mucho con los bandidos aunque sin querer se le oiga más de la cuenta, la relajacion y la yoga, tomar cafes y  las cenas  con sus amigos.

 

   El encargado de moderar la tertulia fue el bandido Gaspar.

   La música vino de la mano de nuestra compañera Lydia, quien nos explicó por qué eligió esa canción y a quién la dedicaba.

 

“He elegido la canción que se titula “A tu vera” de Rosario Flores porque me emociona, la cantante le canta a su madre Lola Flores, con cariño. Todas las canciones del nuevo disco me encantan pero he elegido esta porque lo hace tan bien, tiene una voz muy bonita. Soy la fan número uno de Rosario. Se la voy a dedicar a Lupe y en especial a Loreto”.

 

   En “reflexiones de un bandido” Joaquín M presentaba  a su compañero Joaquín G., quien nos leyó un texto en el que hablaba de su muleta (le ayudaron a leerlo los bandidos  Concha y Roberto).

 

Muletas y amuletos

Mi querida amiga:

         Nos presentaron en el hospital donde yo estaba comenzando a realizar mis ejercicios de rehabilitación  después de haber sufrido un ICTUS cerebral, que me dejó con movilidad reducida. Fue una presentación muy corta. Mi fisioterapeuta me dijo: “esta será tu nueva  compañera de trabajo”.

         Cuando te vi por primera vez no puedo negar que sentí miedo e incertidumbre .Tu figura tan esbelta  y estilizada me hacían preguntarme: ¿soportará mi peso? ¿Cómo te podré coger  para no hacernos daño, o caernos? Pero todas estas preguntas y miedos se fueron disipando cuando, juntos de la mano y temblorosos, comenzamos a caminar por el fascinante y desconocido mundo de la discapacidad. Los primeros pasos fueron muy lentos, y, a pesar de que eres de pocas palabras, haces que me sienta seguro teniéndote a mi lado.

         Había perdido muchas cosas en muy poco tiempo: trabajo, movilidad y autoestima. Y caminaba  desorientado por la vida. Necesitaba algo para valorarme y no sabía dónde encontrarlo.

Salimos del hospital juntos, de la mano. Allí habíamos pasado largos días caminando por sus pasillos e incluso, con mucho miedo, subíamos pequeñas escaleras. Pero había una cosa que no nos habían enseñado: el miedo al  RECHAZO SOCIAL.

         Recuerdo perfectamente que cuando caminábamos por las aceras solíamos ir pegados a los edificios para no molestar a las personas que simplemente caminaban más rápido. Aunque, poco a poco, tomaste la iniciativa y, caminando detrás de ti, me sentí seguro porque tú sabías  hacer  respetar nuestro espacio.

         ¡Mí fiel  amiga y compañera! Siempre dispuesta a acompañarme, a pesar de las malas inclemencias del tiempo, sin poner malas caras ni quejarte. Sabías perfectamente que, a tu lado, me hacías sentir tan seguro que ni tan siquiera recordaba que tenía una hemiplejia. Pero, aun así, necesitaba desarrollar mis capacidades y darlas a conocer.

         Por tu gran experiencia sobre Discapacidad me dejé aconsejar y llegamos a ASPACE HUESCA, una asociación de personas con parálisis cerebral y trastornos afines, donde me ofrecían una serie de actividades apropiadas para mi perfil.

         Recuerdo que llegamos en condición de afines, cogidos de la mano, como dos enamorados; quizás pensando en un posible rechazo de los compañeros por falta de adaptación.

         Pero, todo lo contrario. En ASPACE  da la sensación de que la vida se detiene, pero simplemente se vive más despacio, por lo que se saborea mejor  y se disfruta de ella. Y había muchos compañeros como nosotros disfrutando de ésta.

         Pronto aprendí en el centro de día, sección de adultos, el noble oficio de la cestería. Mientras tanto tú, pacientemente, esperabas a mi lado a que yo me formara. Aprendí lo que era la empatía y trabajar en equipo; y también que necesitábamos insertarnos en la sociedad y dar a conocer nuestras capacidades.

         Comenzamos a dar cursos de CESTERÍA a las amas de casa de muchos pueblos de  nuestra provincia (algunos de ellos sin el acceso adaptado), pero con tu ayuda lográbamos acceder a todos ellos, con alegría. Porque, realmente, a pesar de la complejidad que supone enseñar, nos sentíamos útiles y valorados.

Teníamos tiempo en verano para las vacaciones como personas adultas y responsables que somos. Nuestras primeras fueron a TENERIFE. Allí  todos teníamos alguna discapacidad. Lo recuerdo por el miedo que pasamos para embarcar en el AVIÓN. Tuvimos que subir por las  escaleras de embarque, yo creía que nos estrellaríamos antes de despegar. Pero fueron unos días muy entrañables. Disfrutamos, nos bañamos, que  para eso había aprendido a nadar de nuevo  y, aunque muchas veces caminando fuéramos los últimos del grupo, no nos preocupaba, ya que esto nos daba  más tiempo para soñar y disfrutar. Y, como tú me habías enseñado, lo importante era saber llegar.

         Siempre juntos, como unos privilegiados, estuvimos en congresos nacionales de ASPACE (Pamplona y Málaga), haciendo valer nuestras dotes como cuasi profesionales en  la comunicación, realizando  sendos programas de radio.

         Mi querida amiga MULETA: han sido unos años en los que, dicho con pocas palabras, me has enseñado mucho. Me has ayudado a levantarme yo sólo cuando hemos tropezado y al suelo caído, a saber defenderme en la vida, a valorarme, a levantar mi autoestima y a sentirme útil.

         Me has enseñado tantas cosas buenas y saber  defenderme que ahora tengo miedo de que algún día tenga que dejarte y caminar yo sólo.

Pero estoy seguro de que nunca podré olvidarte

JOAQUIN GRASA, ASPACE HUESCA.

 

         Desde “el rincón del artista” Víctor M. y Alba daban paso al cuento escrito por Carolina B. (ayudada en la lectura por su compañero Nacho) y a una poesía de Cris.

 

Furia y Tobías

         Érase una vez un pueblo del Pirineo en donde vivía un muchacho llamado Tobías. Todos los días, este chico salía por las mañanas con su caballo, que se llamaba Furia, e iban a dar una vuelta por el pueblo y por las montañas de los alrededores.

         Pero un día, al volver de dar una vuelta, se encontró en medio del camino a una muchacha que también iba montada en su caballo. Y ella le preguntó:

-¿Podrías indicarme por donde se va al bosque, donde dicen que hay una cueva?

         Tobías le dijo que tenía que seguir un poco más adelante y luego torcer a la izquierda, y ahí mismo estaba la cueva.

         La muchacha se puso inmediatamente en marcha hacia la cueva, ya que estaba empezando a anochecer. En cuanto llegó a la cueva, la chica, que se llamaba Yolanda, se desmontó de su caballo y se dispuso a hacer un poco de fuego. Pero cuál fue su sorpresa cuando vio aparecer por la entrada de la cueva a Tobías, quien le preguntó:

-¿Qué haces aquí?

         Y ella le contestó:

-Es que no sabía dónde poder descansar, y como me ha pillado la noche, he pensado pasarla aquí.

         Tobías le explicó que esa cueva estaba deshabitada; pero que, según una vieja leyenda,  hacía muchos años vivía ahí un gigante malo. Ahora casi nadie del pueblo y los alrededores la visita, por miedo. Pero que, en realidad, era uno de los rincones más maravillosos del valle, con unas vistas preciosas durante el día y un lugar especial y mágico cuando las noches son estrelladas y cálidas.

         Aquella noche, Tobías y Yolanda estuvieron hablando en la cueva hasta muy tarde, ya que Tobías tuvo la idea de quedarse con Yolanda y traerle algo de comer a la cueva. Así pues, estuvieron toda la noche hablando y contándose viejas historias de su infancia.

         Así se inició una buena amistad, hasta que un día se dieron cuenta de que tenían mucho en común, y que coincidían en muchas cosas. Y también les gustaba estar en la cueva.

         Así, amiguitos, esta historia no acaba aquí, ya que Yolanda y Tobías hicieron una hermosa casa con la cueva. Y con el dinero que pudieron conseguir pusieron una bonita granja en los alrededores. Y ahí se quedaron a vivir, cerca del pueblo pero solos en su lugar encantado. Lo que antes era “la cueva del gigante malo”, hoy es el lugar más bonito del valle.

Y, Colorín colorado, este cuento se ha acabado.   

CAROLINA BERGUA

 

 

poesia de Olga

 

Te quiero como la buena amiga mía que eres

Tan hermosa

Oh ¡cómo me quieres!

Buena y maravillosa como tú no la hay

Todo lo haces muy amablemente

para dar lo mejor al mundo

buena y dulce

La única que me haces disfrutar como antes de tu arte y tu fuerza

Contigo el mundo es genial

Como todo lo haces con mucho cariño,

Por eso yo doy la vida

La más guapa del mundo

mi princesa

como tu vida es bella

eres reina de la fiesta de la vida humana

para todos eres buena amiga

y yo cristina,

soy para ti,

como una hermana

yo te quiero mucho, nadie como yo,

ni riqueza ni soledad

para dar la vida por ti y quererte

yo deseo ser lo que soy, actriz de teatro

Piensa en dar la vida

Y quererme con la fuerza de mi amor que es genial

¿te das cuenta de verdad, que si me quieres con tanta confianza, te doy mi vida por ti?

 

En especial a Olga, Viqui, Pili, Gloria, Carmen y Julia

Mama y yo Cristina, la fan número uno del grupo Pasana.

 

 

        Y así llegamos al final del programa. Las voces de cerrar el programa dando las gracias a los colaboradores fueron: Javier, Víctor, Magdalena, Joaquín M.  y Azucena.

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